La Historia del Hotel Velvet

                   
“Calle Wellington al 1300. Tenemos varios muertos, es un hotel inmenso con más de 1500 habitaciones, ya las revisamos, en todas hay muertos… Dios santo” (Radio de la policía, Holanda, 1977)

El hotel Velvet, siempre fue blanco fácil para los parapsicólogos. Según historias dicen que el hotel esta atendido por muertos, gente que falleció en el ahí mismo. Suicidios, matanzas de todo tipo. Hoy luego de que encontraron a todos los muertos, les contaré la verdadera historia del hotel. Está en pleno funcionamiento pero supuestamente, por gente muerta…

Todo comenzó un día, en el año 1888. El ambiente estaba muy cálido y las personas, dueñas del hotel, estaban contentas al saber que su edificio sería inaugurado.

En la vereda estaban los dueños, y la gente rodeaba la manzana esperando la apertura. Luego del corte de cinta inaugural, la multitud entro a conocer el edificio. Era inmenso, la gente no podía creerlo.

Con el paso del tiempo, el hotel fue ganando más y más  popularidad, era citado como sede de varios eventos. Empezó siendo 4 estrellas pero el excelente servicio, la buena ubicación y el inmenso edifico que tenia, lo convirtió en uno 5 estrellas.

Durante los primeros meses fue el mejor hotel de toda Holanda, pero todo cambio un día de nevada intensa donde había varios cierres de  calles por la nieve. Bajo la larga lluvia blanca, se escucho un golpe en la puerta gigantesca del hotel.

Fue un encargado, abrió la puerta y vio un hombre alto de traje, y con sombrero su cara estaba tapada. Le pregunto si tenía habitaciones y el encargado le dijo que sí.   

Cuando entró, fue a recepción y se sacó el sombrero. Era una persona con mirada perturbadora, un poco sombría, con el cabello largo y oscuro, y una barba que le llegaba al pecho.

Le dieron la habitación 500. Se hospedó ahí, según él, por sólo esa noche. Eran las 3 de la madrugada cuando suena el teléfono de la recepción.

- ¡Recepción!

- Hola, se escucho un ruido en la pieza de junto. Al parecer fue un disparo.

- ¿De qué habitación?

- La 500.

- Muchas gracias por informarnos. Iremos a ver en un momento.

La recepcionista se levantó para ir a avisar al encargado lo que había pasado. Al no encontrarlo decidió ir ella a la habitación. Cuando llego, golpeo una vez y no salió nadie. Golpeo una segunda vez y no paso nada. Una tercera vez golpeo y escucho un ruido que era constante. Sin más que hacer decidió entrar a la habitación. Estaba el huésped extraño, colgado del cuello y al balancearse, se cuerpo golpeaba el enorme ventanal. La recepcionista quedo impactada con la imagen y se dio vuelta para salir de la habitación y la puerta se cerró en su cara. Se dio vuelta nuevamente y el cuerpo ya no estaba colgado, había desaparecido. En ese momento comienza a caminar para ver si estaba cerca del baño, al pasar por la cama, una mano de debajo de la ella salió, le agarró la pierna y la tiro. Cuando miro debajo de la cama, estaba el cuerpo ahí quien le dijo:

- Bienvenida a la maldición.

Luego de aquella noche, el hotel quedo marcado. Y la gente se hacía varias preguntas ¿quién era el huésped? ¿Qué paso con ambos cuerpos? ¿Se encontró alguna evidencia del hecho?

Solo había una carta, escrita, según los estudios, por la recepcionista que decía: “Si me necesitan para algo, solo búsquenme, en la habitación 500.”

La policía no encontró sangre, ni los cuerpos. Solo hubo testimonios de las personas de las habitaciones que estaban al lado. Nada concreto.

Luego de un tiempo, la historia quedo marcada en la sociedad, y nadie quería la habitación 500. Una muchacha de unos 25 años, no le hizo caso y amaneció muerta con los ojos rojos y las manos atadas con alambre. Esto pasó por mucho tiempo, las personas entraban a la habitación y había algo o alguien que los asesinaba. Nadie sabía nada y siempre pasaba lo mismo.

La situación fue empeorando el rendimiento del hotel, ya nadie quería ni acercarse. Luego de un intento fallido utilizando los medios de comunicación para avisar que aquella habitación quedaría anulada, se consideró en plena bancarrota.

Una tarde cálida, cuando estaba a punto de cerrar. Apareció una persona común y corriente y quiso una habitación, la recepcionista sorprendida le pregunta si quería alguna en especial, el hombre aquel dijo, la habitación 500. La recepcionista le dijo que esa habitación no estaba habilitada y el hombre cordialmente le dijo, conozco la historia… Quiero investigar. La recepcionista aceptó.

Mientras investigaba el lugar hasta llegar a la habitación junto a la recepcionista, cuando ésta se va el hombre mira fijamente y se da cuenta que  la recepcionista usaba una pollera larga, la cual no se le podían ver los pies. El hombre dijo, ¿señorita usted tiene pies?, la recepcionista sonrió y dijo, es muy obvio que no. El señor asustado entro apurado a la habitación y estaba la luz apagada. Al prenderla, en la pieza estaban todos los cuerpos de las personas que habían pasado por ahí, colgados y atados en sus manos con alambre. Consternado por la imagen se da vuelta, abre la puerta y estaba la recepcionista... Quien le dijo: Bienvenido a la maldición.

Hoy al cabo de 15 años, estoy encerrado en la habitación con todos los cuerpos colgados, no sé bien si estoy vivo o muerto. Solo sé que no podre salir... Jamás.

        FIN